Photo by Carolina Concetta
Los demonios se retuercen,
aquí todo esta demasiado tranquilo, una tensa calma que no me gusta,
la fiebre y el dolor de cabeza aunadas con el hambre me tienen en un estado anormal,
hay dolores que perseveran y se quedan en tu piel
marcándote como tatuajes mas allá, bajo la dermis entre tu sangre y tú.
Todo fluye, me repito al pasar de los días a mi mismo, pero, la verdad es que me estoy mareando,
estoy harto de esperar algo grande que venga por mi,
así que decidí desde hace días ir por ello,
es así de fácil, si quieres algo en esta vida debes buscarlo, estar postrado en un sillón o tirado en la cama, bajo esa seguridad, no te ofrece mucho mas que eso y un par de sabanas sucias,
necesitas vivir,
golpearte contra la realidad para entender que estas vivo,
no puedes asi de simple, no puede hundir a tus demonios cuando ellos ya aprendieron a flotar,
aprender a vivir con ellos es lo necesario, hacerlos tu fuerte
borrar tus debilidades,
seguir adelante y darte cuenta que
esperar es doloroso, olvidar es muy difícil pero no saber qué hacer es la peor forma de sufrimiento...
Odiarte a ti mismo, es fácil
pan comido,
pero aceptarte e incluso llegar a amarte sin llegar al borde del narcisismo,
ese es el reto,
